energía renovable de la tierra para proporcionar un ambiente confortable en cualquier época del año.
Esta tecnología permite el ahorro de un 85% comparado con el gas y petróleo.

A unos centímetros de profundidad, en el subsuelo encontramos una temperatura bastante estable comprendida generalmente entre 5° y 18°C. Para utilizar este “calor geotérmico de baja energía”, es preciso recurrir a una bomba de calor.

La bomba de calor geotérmica es un aparato que extrae el calor en el suelo, mediante una red de tubos enterrados. Este calor se transfiere a un intercambiador a una temperatura que permite asegurar la calefacción por suelo radiante. El sistema asegura el mejor confort del hábitat.

Aplicable a cualquier proceso industrial que requiera temperaturas hasta 55ºC, siendo posible llegar a mayores valores, pero dependerá de las condiciones específicas de cada aplicación.